Canis lupus familiaris

Los Gran Daneses son gigantes gentiles, conocidos por su disposición calmada y amistosa. A pesar de su gran tamaño, son cariñosos con sus familias y suelen ser buenos con los niños y otros animales. Los Gran Daneses son conocidos por querer complacer a las personas, lo que los hace relativamente fáciles de entrenar con refuerzos positivos consistentes. Requieren ejercicio regular para mantener su salud y felicidad, pero no son excesivamente enérgicos y, a menudo, se contentan con paseos moderados y tiempo de juego. Su tamaño y ladrido pueden convertirlos en efectivos perros guardianes, pero su naturaleza generalmente no es agresiva.

La cría de Gran Daneses requiere una atención cuidadosa a la salud y la genética, dado que son susceptibles a ciertas afecciones como la displasia de cadera, enfermedades cardíacas y torsión gástrica, que es una condición crítica que puede afectar a razas de pecho grande. Los criadores éticos realizarán pruebas para detectar estas y otras condiciones genéticas con el fin de garantizar descendencia lo más saludable posible y proporcionar ejemplares de cría que cumplan con el estándar de la raza en términos de temperamento, tamaño y apariencia.

Los Gran Daneses poseen una figura majestuosa y poderosa, con una musculatura bien formada. Tienen una cabeza ancha, un cuello largo y un pelaje corto y liso que se presenta en varios colores y patrones, incluidos beige, atigrado, azul, negro, arlequín (blanco con manchas negras) y manto. La raza es conocida por su gran altura, con machos que generalmente miden entre 30 y 34 pulgadas a la altura del hombro, y las hembras un poco más pequeñas.

Los orígenes del Gran Danés se remontan a tiempos antiguos, con evidencia de perros similares al Danés representados en artefactos de Babilonia, Egipto y la antigua Grecia. La raza tal como se conoce hoy en día se desarrolló principalmente en Alemania e Inglaterra en el siglo XIX, donde se refinó a partir de una mezcla de razas tipo mastín y tipo galgo. Originalmente fueron criados para cazar jabalíes y proteger propiedades, pero su naturaleza gentil pronto los convirtió en compañeros preferidos.

Hoy en día, los Gran Daneses son mascotas familiares adoradas, conocidas por su comportamiento gentil y su imponente presencia. Son reconocidos por todos los principales clubes de criadores y tienen un grupo dedicado de entusiastas. Los dueños deben estar preparados para los desafíos de criar una raza grande, incluidos posibles problemas de salud, necesidades dietéticas y requisitos de espacio. La socialización y el entrenamiento desde una edad temprana son cruciales para garantizar que crezcan como adultos bien ajustados. A pesar de su esperanza de vida relativamente corta, generalmente de 7 a 10 años, los Gran Daneses son compañeros leales y cariñosos que dejan una impresión duradera en quienes los cuidan.