Oophaga lehmanni

Es un animal diurno y terrestre, principalmente activo durante el día, cuando caza pequeños insectos como hormigas y termitas, que contribuyen a las secreciones tóxicas de su piel. Es una especie muy territorial, con machos que llaman con frecuencia para defender su territorio y atraer a las hembras.

Este sapo practica una forma única de cuidado parental, donde la hembra pone los huevos en el suelo del bosque, que luego son fertilizados por el macho. Después de la eclosión, la hembra transporta los renacuajos a pequeñas charcas formadas en huecos de árboles o bromelias, donde continúa poniendo huevos no fertilizados para alimentar a los renacuajos hasta que se metamorfosean.

El Sapo Venenoso de Lehmann es conocido por su brillante coloración y su tamaño pequeño. La piel de estos sapos contiene toxinas alcaloides que repelen a los depredadores, lo que los convierte en una de las muchas especies tóxicas dentro de la familia Dendrobatidae.

Originario de los Andes occidentales de Colombia, el Sapo Venenoso de Lehmann habita bosques húmedos de tierras bajas y montañosos. Recibe su nombre en honor al conservacionista Federico Carlos Lehmann Valencia, quien contribuyó significativamente al estudio de la biodiversidad colombiana.

El Sapo Venenoso de Lehmann está clasificado como En Peligro Crítico en la Lista Roja de la UICN debido a su distribución muy limitada y el continuo deterioro de la calidad y extensión de su hábitat. Las principales amenazas incluyen la deforestación para el desarrollo agrícola, la minería ilegal y la contaminación de los cuerpos de agua. Los esfuerzos de conservación son cruciales para preservar el hábitat natural restante y mitigar las amenazas para la supervivencia de esta especie.