Generalmente solitaria, vive sobre fondos arenosos cerca de arrecifes o pendientes costeras. Se alimenta de crustáceos, moluscos y peces pequeños, que tritura con sus fuertes mandíbulas. Aunque suele moverse lentamente, puede ser ágil cuando se siente amenazada y se basa en el camuflaje para evitar a los depredadores.