Los gatos atigrados tienen un patrón de pelaje distintivo caracterizado por rayas, manchas o remolinos, a menudo con una forma de "M" en su frente. Sus pelajes pueden ser de varios colores, incluidos gris, marrón, naranja y crema. Los gatos atigrados también suelen tener un cuerpo de tamaño medio con una complexión muscular y ojos expresivos.